EL 8
de septiembre se celebra la natividad de la Virgen María y por eso 9 meses
antes, hoy 8 de diciembre celebramos la Concepción Inmaculada de la Virgen
María.
Pasaron
18 siglos antes de que se proclamara la concepción inmaculada de la Sma. Virgen
María. Fue una revelación que Dios quiso dar a la Iglesia no por alguna personas
sino la revelación apostólica que llegó a la esta conclusión de la inmaculada
concepción de María o la concepción de María sin el pecado de origen teniendo en cuenta esta verdad: Jesús murió
por todos y murió para librarnos del pecado, del pecado de origen y de todos los
pecados personales.
Pero
los teólogos durante siglos se hacían esta pregunta: ¿Cómo pudo la Virgen María
ser concebida sin pecado cuando todavía Jesús no había realizado la salvación
del mundo mediante la entrega de su cuerpo en la cruz. Consecuencia: la Virgen
María, se decía tuvo el pecado de origen, no fue concebida sin pecado original
puesto que necesitaba también ser salvada por Jesús.
Pero
según luces que da el Espíritu Santo da al cuerpo de la Iglesia que somos
nosotros, particularmente en el caso de las autoridades de la Iglesia y a los
estudiosos, se llegó a esta conclusión: Jesús trasciende el tiempo, vino en x año en x día pero el Verbo de Dios,
la persona del Hijo de Dios existe desde siempre, luego aún cuando la Virgen
María haya venido antes del Verbo hecho carne, ya ante la presencia de Dios
estaban los méritos de Jesús desde toda la eternidad y así por los méritos de
Jesús vistos por Dios desde toda la eternidad, preservó a la Virgen María de
toda mancha en el caso del pecado original.
Ya
San Pablo en la Epístola de los Romanos
decía que los méritos de la muerte de Jesús valía también para todo el mundo que
había venido antes de Él. De tal manera que ya la misma Escritura como que
tenía en cuenta el camino para poder dictaminar, declarar, el dogma de la
Virgen María concebida desde siempre sin ninguna clase de pecado, aún y cuando
después viniera Jesús el Verbo Encarnado pero fue la gracia de su inmaculada concepción merecida
por el mismo Jesús aplicándose a ella, desde antes de que el Verbo se hiciera
carne, los méritos del Verbo hecho carne muerto y resucitado.
Y
por eso pasaron muchos siglos hasta que llegó el 8 de diciembre de 1854 cuando
el Papa Paulo IX declaró el dogma de la Inmaculada Concepción de la Virgen
María.
*** FRAGMENTO DE LA HOMILIA DE 8 DE DICIEMBRE DEL 2010, EN EL IPB POR EL P. SALVADOR CARRILLO ALDAY