viernes, 8 de diciembre de 2017

EL JUICIO FINAL: Mt 25,31-46*

PRIMERA PARTE:

¡Cuadro admirable que cierra el Discurso Escatológico y pone fin al ministerio público de Jesús!
"Al término de un largo Discurso, cuya segunda parte está consagrada al advenimiento del Hijo del hombre, signo de salvación o de pérdida para los siervos fieles o infieles, las vírgenes prudentes o locas, los colaboradores activos o perezo­sos, Jesús proyecta todos estos juicios particulares en el con­junto del Juicio universal.
No es la conclusión de una escena diferente, sino la indi­cación del motivo supremo que permitirá juzgar, cualquiera que haya sido la condición particular en esta vida.
Este espectáculo solemne, cuyos elementos están tomados del escenario de los apocalipsis, está imbuido del más puro espíritu de Jesús, fuertemente opuesto al del Judaismo, el cual esperaba del Juicio universal la satisfacción de sus rencores" (Lagrange, St. Matthieu, p. 48s).
El pasaje presenta tres cuadros y una conclusión:
1º Un gigantesco escenario: w. 31-33.
2º El juicio de los buenos: w. 34-40. 
3º El juicio de los malos: w. 41-45. 
Conclusión: la suerte eterna: v. 46.

I.—GIGANTESCO ESCENARIO DEL HIJO DEL HOMBRE: vv. 31-33.
"Cuando el Hijo del hombre venga en su gloria, acompañado de todos sus ángeles, se sentará en su trono de gloria.
Serán congregadas delante de él todas las naciones
y él separará a los unos de los otros,
como el pastor separa las ovejas de los cabritos.
Pondrá las ovejas a su derecha ¡

y los cabritos a su izquierda": vv. 31-33.

El Hijo del hombre aparece en todo el esplendor de sr poder; a él están sujetas todas las cosas, hasta los angels; "La gloria" es el halo que lo envuelve. Es un soberano uni­versal. En esta figura grandiosa del Hijo del hombre se pre­siente un carácter divino. Otros textos de Mateo se integran en este concierto: 13,41; 16,27; 19,28.
Ante él serán congregadas "todas las naciones". La pers­pectiva es de un universalismo absoluto: todos los hombres de todos los tiempos. La forma pasiva revela que el sujeto en el fondo es Dios. Se trata de un juicio definitivo. La idea de Jesús Juez se dibuja en el Evangelio: Mc 8,38; Mt 16,27; 19,28.
"Ovejas y cabritos". Es un rasgo parabólico. ¿Por qué Jesús escogió esta imagen para hablar del juicio? Desde luego es una imagen netamente palestinense. Además la naturaleza misma de estos animales lleva a hacer la distinción: las ovejas son símbolo de dulzura y de docilidad, su color blanco atrae, obedecen fácilmente al llamado del pastor; no así las cabra; que son de color oscuro y se muestran ariscas, hurañas, mon­taraces e independientes. Si se tratara de formar dos grupos de animales que contrastan, fácilmente se haría entre ovejas y ca­bras, que, aunque diferentes, siempre se les encuentra juntas.
"La derecha y la izquierda" han servido siempre de signos convencionales para marcar mayor o menor dignidad o pre­ferencia.


* Esta parábola la presentaremos en tres partes.
Salvador Carrillo Alday M.Sp.S. LAS PARÁBOLAS DEL EVANGELIO. pags. 131-132  Instituto de Pastoral Biblica. México, 1992