viernes, 15 de febrero de 2019

PARÁBOLA DE LA LEVADURA: Mt 13,33; Lc 13,20-21.


Conservada por Mateo y por Lucas, la parábola de la levadura ofrece en Lucas una presentación más personal: "¿A qué compararé el Reino de Dios?" El resto del texto es igual en ambos escritores.
"El Reino de los Cielos es semejante a la levadura que una mujer tomó, y escondió en tres seas de harina, hasta que fermentó todo".
En realidad, la comparación estará en el término del pro­ceso, es decir, en la cantidad de masa fermentada por la levadura. Una mujer oculta (un poco de) levadura en tres medidas de harina. Una medida (seá) equivale a unos 15 litros; por lo tanto, las tres medidas dan un total de 45 litros de harina (como en Génesis 18,6) y que proporciona pan para más 100 personas. Esta cantidad de masa, exagerada para las necesidades de una mujer de casa, nos lleva a pensar que el parabolista ha querido causar honda impresión. Para él, es cuestión de realidades divinas.
Se trata de una parábola de contraste; el principio con­trasta con el término: ¡Un poco de levadura es capaz de fer­mentar 45 litros de harina!
La señora de casa lo mezcla, lo cubre con un lienzo, deja así la masa toda la noche y por la mañana la gran cantidad de harina está ya fermentada.
¡Así sucede con el Reino de los Cíelos que Jesús está implantando! Sus principios son minúsculos y ocultos, como el poco de levadura que la mujer esconde en los 45 litros de harina. El verbo "esconder" es elocuente; quiere significar que la fuerte actividad de Dios, aunque secreta e invisible, sin embargo es soberanamente eficaz.
Finalmente, la levadura es de ordinario símbolo de mali­cia y de iniquidad. Marcos escribe "Guardaos de la levadura de los fariseos, que es la hipocresía": 8,15. Y con ocasión de la fiesta de Pascua se purificaba la casa de todo pan fermen­tado: 1 Co 5,6-8. Pues bien: Jesús ha querido comenzar la Implantación del Reino de los Cielos llamando a los pequeños, a los humildes, a los pecadores. Con ellos ha comenzado el Reino de Dios que abrazará a todos los pue­blos de la tierra.

Salvador Carrillo Alday M.Sp.S. LAS PARÁBOLAS DEL EVANGELIO. pág. 61-62. México, LA CAMPANA. IPB 2011