Mis
hermanos ¡qué grande es la Eucaristía!
El
título de la conferencia es la Eucaristía nos salva, es el mismo Jesús. Jesús
quiere decir Yhavé salva, Dios salva y no quiere decir que Dios salve a través
de Jesús, sino que Él mismo salva porque Él es Dios.
El
ángel le dice a San José le pondrás por nombre Jesús y a la Virgen María
también le dice que le ponga por nombre Jesús. La misión de Jesús será ésa.
Cuando nuestros primeros hermanos cristianos se dieron cuenta de lo que
significaba el nombre de Jesús entonces
le pusieron el nombre de El Salvador.
¿Porqué
Jesús es llamado el El Salvador? Porque es Dios que salva y se convirtió la
palaba el salvador en un nombre propio de Jesús, porque Jesús Eucaristía salva,
es nuestro Salvador.
En
Lucas cuando nace Jesús dice “hoy os ha
nacido un Salvador…”
En
Juan “este es verdaderamente el Salvador
del mundo”
En
Hechos de los Apóstoles: “ a este Dios lo
exhaltó como Jefe y Salvador”
En
Filipenses “nosotros somos ciudadanos del
cielo de donde esperamos como Salvador a nuestro Señor Jesucristo”
En
Efesios “Él es el salvador del cuerpo que
es la Iglesia”
En
Juan “el Padre envió a su hijo como
salvador del mundo”
Y
ahora debemos ser prácticos no nada más especulativos y pensar si la Eucaristía
es Jesús que salva porqué no pedirle a ese Jesús que salva, que nos salve¡
Insistámosle: ¡realiza tu nombre¡Él
nos contesta ¿de qué quieres que te salve?
En
los evangelios benignamente nos dice mi salvación yo la comuniqué en cuatro
niveles,
1.
Liberé a los oprimidos por el
demonio, porque se había entregado a Satanás. Cuando uno se entrega
voluntariamente a cosas que no son Dios, a cosas del ocultismo, vienen unas cadenas
insoportables que no sabe uno dónde se metió.
2.
Liberó del pecado, un ejemplo es
aquel paralítico al que los amigos llevan para que lo sane y Jesús lleno de
misericordia y de compasión primero le perdonó sus pecados. ÉL dice yo no he
venido por los que se dicen justos y buenos sino por los pecadores. La
parálisis espiritual es más fuerte que la parálisis física.
3.
Liberó de la enfermedad al
paralítico de Betesdá, le dijo has sido curado no vayas a pecar.
4.
Liberó de la muerte y como ejemplos
anticipados resucitó a la hija de Jairo,
al hijo de la viuda de Naím y a su amigo Lázaro.
¿De qué queremos que nos libere?
¿De
qué le quiero pedir a Jesús Eucaristía que nos libere?
De
alguna carga de pecado?
De
alguna esclavitud psicológica o espiritual?
De
alguna cadena que me ata?
De
alguna situación angustiosa que me deprime?
De
alguna muerte espiritual en la que me encuentro yo en este momento?
Podemos
decirle a Jesús aquí estoy frente a ti, mírame y ten compasión de mí. Libérame de
la esclavitud del pecado, obra en mí una plena sanación interior, dame la
sabiduría completa del alma y cuerpo para poder servirte mejor.
Sáname,
cúrame, restabléceme, yo confío en ti, tú eres mis Señor y mi Dios.
Jesús,
tú viniste a glorificar a tu Padre liberando
del pecado a los hombres y dándoles nueva vida. Yo te pido que hoy glorifiques
a tu Padre en mí. Repite hoy en mí los prodigios que hiciste ayer en tantas
personas que te encontraron.
Señor
aquí estoy tú sabes que te amo.
*Estamos presentado en cuatro partes la conferencia del P. Carrillo sobre la la Eucaristía en un retiro de Semana Santa, expuesta de manera sencilla pero muy profunda como él nos explicaba los misterios de nuestra fe.