"Pero ¿qué os parece? Un hombre tenía dos hijos. Llegándose al
primero le dijo: 'Hijo, vete hoy a trabajar en la viña'. Y él respondió: 'No
quiero', pero después se arrepintió y fue. Llegóse luego al segundo, y le dijo
lo mismo. Y él respondió: 'Sí, Señor', y no fue. ¿Cuál de los dos hizo la
voluntad del padre? —"El primero", contestaron. Díceles Jesús:
"En verdad os digo, que los publícanos y las rameras llegan antes que
vosotros al Reino de Dios. Porque vino Juan a vosotros caminando en justicia y
no creísteis en él, mientras que los publícanos y las rameras creyeron en él.
Y vosotros ni viéndolo os arrepentisteis después para creer en él": 21,28-32.
1.—Al leer atentamente esta parábola, el v.
32, que alude a Juan el Bautista, parece ser una añadidura que constituye una
redundancia advenediza. Dos observaciones nos permiten pensar que ese
versículo es un logion de Jesús, incrustado en este sitio, ya sea por el
redactor de Mt, ya sea por la tradición evangélica anterior.
En efecto, Lucas ha conservado en otro
lugar el recuerdo de la aceptación que los publícanos hicieron de Juan y el
rechazo por parte de los Fariseos y Legistas: Lc 7,25-30. Además, la fórmula "En verdad os digo..." del v. 31 indica, como en otros casos: Mt
5,26; Lc 14,24; 15,7.10; 18,14; que la parábola termina allí.
Siendo así, el v. 32 ha sido colocado en
el sitio donde lo leemos en virtud de la atracción de palabras e ideas', ya que
en el v. 31 se habla de los publícanos y las rameras', y en el v. 25 se había
tratado del Bautista.
2.—Y
¿cuál es el sentido de la parábola?
Los publícanos y las prostitutas precederán en el Reino de los Cielos
a los jefes religiosos de Israel. Estos han dicho un "sí" a Dios,
pero no han aceptado el mensaje que El les mandaba por medio de Jesús;
aquéllos, al contrario, que habían llevado una vida de pecadores, diciendo un
"no" a Dios, ahora se arrepienten y aceptan la Buena Nueva.
En el contexto de Mateo, la parábola, con
su alusión al Bautista, adquiere una perspectiva más amplia. Se relaciona con
la discusión sobre la autoridad de Jesús y de su Precursor: 21, 23-37, y se liga
con la parábola de los viñadores homicidas que dieron muerte a los enviados de
Dios: 21,33-41, entre los cuales hay que contar a Juan el Bautista.
Salvador Carrillo Alday M.Sp.S. LAS PARÁBOLAS DEL EVANGELIO. pags. 122-123 Instituto de Pastoral Biblica. México, 2011