jueves, 12 de septiembre de 2019

LA EUCARISTÍA SALVA (primera parte)*

La eucaristía es la síntesis de nuestra fe, poco profundizada, muy conocida superficialmente.

¿Qué es la Eucaristía, ¿Qué nos hace la Eucaristía? ¿Cómo beneficiarnos de ese regalo que Dios nos ha hecho en la Eucaristía?

El título de la conferencia es : La Eucaristía nos salva pero está dependiendo del grande título que es: La Eucaristía, fuente y culmen, origen y fin de la vida y de la misión de la Iglesia.

Cuando se llega a comprender esto la misa dominical deja de ser un problema aburrido y se convierte en un interés enorme como centro de mi vida durante toda la semana. La misa comprendida de todo los que significa cambia la vida y cambia la comprensión de nuestra fe, ¿porqué? . Porque es la fuente, de la fuente brota el agua, y es a la vez la cumbre de la vida de la Iglesia y de la misión que tiene.

El título de esta comunicación es la Eucaristía nos salva. Este título quiere decir que la Eucaristía es salvación, que de la eucaristía brota salvación,  que es fuente de salvación, que ella es salvación, pero a pesar de haber dicho muchas palabras ustedes me van a preguntar ¿qué es la Eucaristía? Y les respondo con una sóla palabra importantísima. La Eucaristía es una persona, y esa persona es Jesús.
En la hostia y el vino que presentamos al Padre en el momento del ofertorio, cuando se llevan las ofrendas, el sacerdote toma las hostias sin consagrar y las ofrece en nombre de toda la comunidad, dándole gracias a Dios por ese pan que ahora nos ha dado y ahora le ofrecemos y ese cáliz con el vino agregando un poquito de agua como símbolo de que nosotros queremos estar dentro de la sangre misma de Jesús, después de eso ofrece el sacerdote el vino diciéndole al Padre, gracias Padre por ese vino que nos has dado para la alegría de nuestra vida, como tú nos lo diste ahora nosotros te lo regresamos para que tú lo conviertas en la sangre de Jesús , llegado un momento el pan ya no será pan, el vino ya no será vino, sino será sustancialmente,  la palabra sustancialmente es importantísima, el cuerpo y la sangre de Jesús.

¿En qué momento se realiza ese misterio y milagro colosal? , en el momento en que después del canto Santo, Santo, Santo, que debería ser un canto de gloria, el sacerdote confirma la confesión de toda la comunidad  y dice el sacerdote: Santo eres en verdad Padre fuente de toda santidad, te pedimos, y extiende sus manos en el pan y el vino, te pedimos que santifiques estos dones con la efusión de tu Espíritu, , esto es te pedimos Padre que en este momento derrames tu Espíritu Santo a fin que sean para nosotros el cuerpo y la sangre de Jesu Cristo Nuestro Señor. Momento gloriosísimo en la celebración de la Eucaristía.
El cielo se une con la tierra y se produce el momento más estupendo que pueda haber ó puede uno imaginar pero no se ve porque es algo divino, algo sobrenatural, algo fuera de este mundo. Pero qué grandioso momento cuando el Padre a la petición de toda la Iglesia reunida para la celebración de la Eucaristía, invoca al Padre para que envíe  su Espíritu Santo y el Espíritu Santo poder de Dios transforme el pan en el cuerpo de Jesús y el vino en su sangre. Momento augusto en que nosotros los humanos asistimos sin darnos cuenta de lo que pasa, ¿se imaginan cómo estará Dios en ese momento?
El Padre enviando su Espíritu Santo y el Espíritu Santo haciendo la obra maravillosa que no cabe en la cabeza,  de la transformación del pan en el cuerpo de Jesús y el vino en su sangre.
Y el sacerdote, tomado de entre la comunidad de hermanos, el sacerdote actúa en ese momento, según nuestra teología, según nuestra fe, actúa en representación , en lugar de Cristo Sacerdote.
El sacerdote actúa en lugar físico sensible de Cristo Sacerdote que está ahí y va a estar en el pan y en el vino consagrado. Las palabras que dice el sacerdote las dice en primera persona, lo realiza en representación de Cristo. El sacerdote no narra  lo que hizo Jesús en la cena sino repite las palabras que el mismo Jesús pronunció en la Cena: “tomad y comed todos de Él porque este es mi cuerpo, Tomad y bebed porque esta es mi sangre de la Alianza Nueva y Eterna derramada por vosotros y por todos los hombres para el perdón de los pecados”.



* Estaremos presentado en varias partes la conferencia del P. Carrillo sobre la la Eucaristía en un retiro de Semana Santa, expuesta de manera sencilla pero muy profunda como él nos explicaba los misterios de nuestra fe.