jueves, 28 de mayo de 2015

Primera multiplicación de los panes (Mc 6,34-47; Mt 14,15-23; Lc 9,12-17; Jn 6,1-15).


Segunda Parte:

El prodigio (v.35-44).

35: Era ya una hora muy avanzada cuando se le acercaron los discípulos y le dijeron: "El lugar está deshabitado y ya es hora avanzada.36: Despídelos para que vayan a las aldeas y pueblos del contorno a comprarse de comer". 37: Les contestó: "Dadles vosotros de comer". Ellos le dicen: "¿Vamos nosotros a comprar doscientos denarios de pan para darles de comer?.  38: El les dice: "¿Cuántos panes tenéis? Id a ver". Después de haberse cerciorado, le diccen: "Cinco, y dos peces".

El lugar era deshabitado, sin embargo había aldeas cercanas.Esto hace pensar más bien en la orilla noroeste del Lago. La reflexión de los discípulos era sensata. Es Jesús quien los sorprende inesperadamente con su reacción:  "Dadles vosotros de comer". Inmediatamente piensan en la compra de pan que tendrían qué hacer. ¿De dónde sacar doscientos denarios? Un denarios era el jornal de un trabajador agrícola. Y habría qué añadir: Y ¿dónde encontraron encontrar tanta cantidad de pan?  Hecha la investigación sobre los panes que tenían, la respuesta fue: cinco panes,más dos peces.

39: Entonces les mandó que se acomodaran todos por grupos sobre la hierba verde. 40: Y se acomodaron por grupos de cien y de cincuenta. 41: Y tomando los cinco panes y los dos peces, y levantando los hijos al cielo, pronunció la bendición, partió los panes y los iba dando a los discípulos para que se los fueran sirviendo. También repartió entre todos los dos peces.

La mención de la "hierba verde", junto con el tema del pastor, del reposo y del pan, recuerdan el salmo 23, que presenta a Dios como el buen pastor de Israel. El acomodo por grupos de cien y de cincuenta, evoca la organización de Israel durante los años del desierto, considerada como el orden ideal para el pueblo de Dios. 

El v. 41 es la cumbre histórica y teológica del relato. Cinco acciones se suceden cómo eslabón de una cadena. El colorido eucarístico impreso al relato es evidente.

     1. Jesús tomó los cinco panes y los dos peces.

     No sólo le son presentados los panes y los peces, sino que el mismo los toma.

     2. Levantó los ojos al cielo.

     Este gesto debió ser característico de Jesús. Lo hace cuando sana al sordo mudo (Mc 7,34), cuando resucita a Lázaro (Jn. 11,41), cuando ora a su Padre en el cenáculo (Jn. 17,1). Aquí "el levantar los ojos al cielo" tiene una conotación soteriológica.  Este gesto ha pasado a las liturgias eucarísticas de muchos ritos: romano, bizantino, corto, etíope sirio, maronita, etcétera.

     3.pronuncio la bendición. 
     La bendición es la oración de alabanza y de acción de gracias (Todá) que se hace en la liturgia judía, al romper el pan. Está bendición servía para recordar los beneficios de Dios a su pueblo. La liturgia cristiana la ha enriquecido con un sentido nuevo, a la luz de de la Pascua salvífica del Señor.

     4. Partió los panes y los dió a sus discípulos para que los distribuyeran.
     Jesús es quien parte los panes, pero los da a sus discípulos para que ellos lo distribuyan. Marcos insiste en la invitación que Jesús hace a los discípulos para que colaboren con él (v.38.39.41.43). Les  'está dando una formación en acto'. Lo que Jesús hace lo deberàn hacer también ellos. Serán sus seguidores y colaboradores (cf Lc 22,19).

     5. Tambièn repartió los dos peces.
     Muy probablemente en el momento histórico del prodigio, los peces tuvieron la importancia que se merecen en una comida. Pero, como el milagro fue percibido más tarde como un anuncio de la Eucaristía en la que el pan y el vino son los elementos del Sacramento, los peces fueron perdiendo relieve y aparecen como un elemento suplementario (cf.Mt-Lc).